Cuando un emprendedor se plantea desarrollar un negocio bajo el sistema de franquicias debe conocer las ventajas que supone trabajar bajo una gran marca o bajo una pequeña enseña. Entre las ventajas de los grandes operadores se encuentran la solidez de su marca corporativa entre los clientes o un sistema operativo muy desarrollados. Las pequeñas, destacan, sin embargo, por su flexibilidad y por su cercanía al franquiciado. La mayoría de las personas que inician su actividad como franquiciados conocen el nombre de mega-sistemas que operan en franquicia en sectores de comida rápida, como McDonald's, operadores de hostelería como Il Café di Roma u otro tipo de formatos de negocios comoCarrefour. Estos sistemas son grandes y, como todas las formas de negocio, tienen sus ventajas y sus desventajas a consecuencia del tamaño. Cuando un emprendedor inicia su empresa como franquiciado espera, al menos, recibir dos cosas: una marca valiosa y un sistema operativo desarrollado. La principal ventaja de las grandes empresas de franquicia es que ambos ya están puestos en marcha. Si la franquicia es grande, a la hora de seleccionar la marca es sencillo realizar una encuesta de sensibilización entre los consumidores y preguntar sobre las actitudes que despierta la marca, puesto que es más conocida. Del mismo modo, también se puede fácilmente determinar el historial de la franquicia en visitas a franquiciados que hayan estado operando durante mucho tiempo con ellas y preguntarles alguna información que sea del interés del inversor. Otra ventaja que los grandes sistemas de franquicia pueden ofrecer al nuevo franquiciado es la seguridad y la fiabilidad. El riesgo de entrar en un gran sistema de franquicias es, generalmente, más bajo, porque han trabajado todos los errores de sus procedimientos hace mucho tiempo. Aunque todo ello no significa la garantía de éxito, hay menos incertidumbre debido a la gran cantidad de información disponible sobre el mercado y sus operadores. En el caso de franquicias grandes como Telepizza, los franquiciadores destacan sobre todo tres ventajas, la mayor es que es un negocio de éxito que ya está probado. La enseña cuenta con más de 550 establecimientos, de los cuales, aproximadamente la mitad son establecimientos propios, con esta experiencia de negocio consolidado, los franquiciados se sienten más seguros de la viabilidad del proyecto. Otra de las ventajas que señalan es que directamente ceden el Know How y la formación sobre su experiencia y, por último, que hay una labor de consultoría constante al servicio de los franquiciados. La responsable de expansión de Subway, Alejandra D´Agostino, destaca también "el Know How muy potente y preparado para una red de más de 29.000 establecimientos en 86 países diferentes". Además, invertir en esta franquicia supone contar con el apoyo de una multinacional que nació en 1965 con un sistema de franquicias perfectamente estructurado. En contraprestación estas franquicias suelen suponer un desembolso mayor a la hora de la inversión, aunque como aspecto positivo, este desembolso se compensa con un riesgo menor debido a que operan bajo la larga experiencia de muchos establecimientos abiertos. La flexibilidad de las pequeñas empresas. Por otro lado, tenemos a las franquicias con un desarrollo menos amplio, que a su vez, también cuentan con ventajas que las hacen seductoras para los inversores y los emprendedores. En ellas es más fácil tener creatividad o libertad para elaborar nuevos proyectos e incorporarlos a un negocio. Aspectos como la creatividad o la innovación son cruciales para la competitividad de las empresas en el mercado. En estas franquicias la gestión de los negocios es menos compleja, con jerarquías más cortas y cercanas que, generalmente, facilitan la comunicación entre los diferentes agentes del mercado. Esto es comprensible, ya que cuando una empresa alcanza cierto tamaño necesita estandarizar sus procesos para evitar el caos. Al ser de menor tamaño, estas franquicias son más flexibles, lo que les da la oportunidad de adaptarse a las imposiciones del mercado con mayor facilidad que una gran empresa. Este aspecto destaca, sobre todo, en aquellos momentos de recesión económica siempre que las empresas tengan una marca y una estructura bien consolidada y desarrollada. Por otro lado, la pequeña empresa es un lugar donde los puestos de trabajo están menos acotados. Generalmente, en las grandes empresas el personal tiene unas directrices y no sale de esos límites. En las pequeñas, los roles de los puestos de trabajo no están tan definidos y se puede tener una visión más global de los servicios que presta. Además, muchas veces son las pequeñas empresas las que satisfacen necesidades de las grandes compañías, ya que surgen como distribuidoras de empresas de mayor tamaño, agentes de servicios o proveedores. La especialización de bienes y servicios es mayor en las pequeñas franquicias, resuelven las necesidades especiales de los consumidores, como es el caso de Kidy Froh, que centra sus productos y servicios en el sector de la puericultura con productos dirigidos a la seguridad infantil. Entre las ventajas que supone para trabajar para franquicias como esta es ofrecer un tipo de negocio pionero y diferente que ya cuenta con experiencia en el mercado. Además, la enseña se muestra cercana a sus franquiciados con asesoramiento continuo en recursos humanos, selección del local, formación inicial y continua, manuales de actuación, asistencia técnica, software de gestión común a la Red y reuniones periódicas. En el caso de Casa Joven, cadena dedicada a la venta al por menor de artículos de menaje, textil y decoración y hogar, Raquel Mateos, la responsable de expansión destaca como ventajas concretas de su franquicia para sus franquiciados el hecho de "impartir un curso de 15 días de duración en nuestra tienda piloto de Madrid y una vez culminadas las labores de adecuación y decoración del local, la central enviará una persona que marcará las directrices a seguir y ayudará en la colocación del producto". La cercanía del franquiciador se muestra en actos como el seguimiento constante basado en visitas periódicas por parte del responsable de zona, además, el franquiciado tendrá y gozará de los mismos servicios que ya gozan las tiendas propias de la cadena. Por otro lado, encontramos ventajas generales a la hora de negociar las clausulas de la firma de los contratos cuando la enseña es más pequeña, debido a que para ellos, el inversor no es un número de tantos inversores como en las grandes cadenas, sino un franquiciado al que hay que "mimar". Al mismo tiempo, una vez que la franquicia empiece a expandirse de una manera amplia, los primeros franquiciados se convertirán en grandes valores de la empresa, que cuentan con más peso y donde depositar mayor confianza. Por último, también hay que destacar que estas franquicias suelen requerir una menor inversión en comparación con las grandes cadenas, esto supone que están al alcance de más emprendedores. 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